Reducir la factura municipal de la luz gracias a la implantación de lámparas más eficientes en los sistemas de alumbrado público. Ese es el objetivo del plan de renovación municipal del Ayuntamiento de Valladolid que en 2013 implicó la sustitución de 3.533 lámparas y equipos lumínicos.

Estas actuaciones se llevan a cabo anualmente en todos los puntos de la capital. Y un buen ejemplo son los que se han realizado en los últimos meses en el Paseo del Cauce. Así, desde marzo de 2013 y hasta este mes de abril, la Concejalía de Urbanismo ha procedido a la sustitución de 435 lámparas de mercurio por otras con placas de leds, «con mejor rendimiento lumínico», como aseguran fuentes municipales. Estos trabajos de renovación también han conllevado la eliminación de 66 puntos de luz que se consideran «innecesarios» porque las nuevas luminarias «tienen más potencia lumínica», señalan las mismas fuentes.

Estas labores de mantenimiento de farolas son similares a los realizados ya en otras zonas de la capital dentro  de los planes municipales para conseguir «mejor eficiencia energética, la sostenibilidad del alumbrado público y la incorporación de tecnologías innovadoras», como figura en un convenio firmado con la multinacional Philips.

Según los datos de  esta firma especializada en iluminación, estos nuevos sistemas que se están implantado garantizan un ahorro en la factura de la luz  de entre un 35 y un 90%. Un ejemplo es el Puente de Isabel la Católica, donde con las nuevas lámparas los consumos han disminuido en torno a un 35%.

Brigada del alumbrado. En la capital existe una ‘brigada del alumbrado’ que se encarga de vigilar el perfecto funcionamiento del sistema. Ellos son los encargados de sustituir las lámparas por otras de menor potencia, de reducir en algunos casos el número de farolas, de cambiar las lámparas ineficientes por otras eficientes, de sustituir luminarias con bajos rendimientos y de cambiar equipos eléctricos por otros electrónicos.

Y así, según la memoria realizada por el área de Urbanismo el año pasado instalaron, por ejemplo, 186 placas leds en la Acera de Recoletos, 109 en el barrio de Belén, 28 en la zona de la Facultad de Medicina o 40 en el puente Mayor. Esta renovación también incluyó 4.251 reposiciones de lámparas y la limpieza de 1.173 luminarias. Además, los técnicos municipales tuvieron que reponer en 639 ocasiones partes de las farolas por daños ocasionados por actos vandálicos y 54 por accidentes.
Unos objetivos que siguen vigentes este año y que implicarán, según el contrato para el suministro de lámparas de equipos auxiliares de encendido y piezas de recambio de luminarias, un gasto municipal de 52.000 euros, mientras que para 2015 está previsto que la cantidad se eleve hasta los 104.000 euros.

Aunque no todos los grupos políticos en el Ayuntamiento comparten esta filosofía. «Tales objetivos razonables deben contar con las explicaciones técnicas oportunas. Hemos pedido información en el Consejo de Gerencia, en el debate sobre los presupuestos y en la Comisión de Sugerencias y Reclamaciones, y en ningún caso se nos han facilitado ningún plan global de actuación en la ciudad ni de los criterios técnicos manejados. Así no es posible evaluar lo que se hace», advierte el portavoz de la formación, Manuel Saravia.

La eliminación de los puntos de luz también ha recibido criticas de algunos vecinos del paseo del Cauce y de La Rondilla. «Hemos recibido quejas de muchos vecinos. Algunas se refieren a la pérdida de visibilidad y seguridad que se produce con el cambio. Otras aluden a comparaciones entre las áreas centrales y los barrios», advierte Saravia.

 

Fuente: eldiadevalladolid.com (ver noticia)