La reforma energética traerá una sorpresa amable para las familias con consumos eléctricos más elevados. El recibo de todos aquellos que estén acogidos a la hasta ahora denominada tarifa de último recurso (TUR) con consumos superiores a los 4.000 kWh/año anuales bajará a partir de agosto. Por el contrario, a lo pequeños consumidores de electricidad, entre los que se incluyen no sólo las segundas viviendas y las vacías, se les incrementará sustancialmente por encima del 3,2% anunciado por el Gobierno.

La orden de peajes de acceso que el Ministerio de Industria ha enviado a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) contempla una subida del 77% en el término de potencia (los costes fijos del recibo), mientras que el de energía se reduce el 23% (ver cuadro 1). Con ello, el Gobierno pretende que ambos parámetros pesen igual en la factura (hasta ahora representaban, respectivamente, el 30% y el 70%).

Estas variaciones conllevan un incremento medio del 6,5% de los peajes, según los cálculos del departamento que dirige José Manuel Soria. No obstante, fuentes sectoriales estiman que la subida de los peajes será ligeramente inferior, del 6,3%. Este desfase limitaría los ingresos estimados por el Gobierno de 900 millones anuales a 850 millones (350 millones en lo que queda de 2013).

De una u otra forma, este aumento repercutirá en la tarifa de último recurso (TUR), ahora denominada Precio Voluntario al Pequeño Consumidor. En este sentido, el Gobierno estima que supondrá un incremento del 3,2% (según los cálculos del sector podría ser del 3%) para los 17,2 millones que aún permanecen en la tarifa regulada (por debajo de 10 kW). En concreto, la parte de potencia se elevará el 63%, mientras que el término de energía bajará de 0,14 a 0,12 euros/kWh, el 11% menos (siempre considerando los precios que arrojaron la última subasta de energía correspondiente al tercer trimestre).

Los precios de los peajes				Los precios de la TUR*
	Tercer trimestre 2012	Agosto	Variación		Tercer trimestre 2012	Agosto	Variación
TPA - Potencia (€/kW/año)	17,893189	31,590425	77%	TPU - Potencia (€/kW/año)	21,893189	35,590425	63%
TEA - Energía (€/kWh)	0,068998	0,053156	-23%	TEA- Energía (€/kWh)	0,140728	0,124886	-11%

TPA: Término de potencia de los peajes; TEA: Término de energía de los peajes; TPU: Término de potencia contratada; TPU: Término de energía consumida.

* La Tarifa de Último Recurso (TUR) ha pasado a denominarse Precio Voluntario al Pequeño Consumidor

Soria vendió el pasado viernes que la subida de la parte fija del recibo castigará a las segundas viviendas y a las vacías, ya que pagarán más consumiendo muy poca electricidad o incluso nada. Y es cierto. Así, una vivienda con una potencia contratada de 4,6kW y si ningún consumo destinará 164 euros anuales a partir de agosto, frente a los 101 euros actuales, lo que supone un aumento del 63%.

Pero lo que no dijo el ministro fue que esta decisión dañará más a los pequeños consumos (habituales) que a los grandes. Con los nuevos peajes, la TUR se encarecerá por encima del 3,2% anunciado por el Gobierno para todos aquellos hogares que consuman menos de 2.500 kWh al año, equivalentes a un gasto inferior a los 453 euros anuales. Desde una parte del sector eléctrico, lamentan que esta medida “echa por tierra los esfuerzos por fomentar la eficiencia energética”.

 

La mayoría de hogares con uno o dos miembros se incluirán en este grupo. Por ejemplo, las viviendas con una potencia contratada de 4,6 kW y con un consumo de 1.500 kWh dedicarán un 12,5% más a la factura eléctrica a partir de agosto, es decir, casi 40 euros más al año; para las de 2.000 kWh, un 8,11% más (31 euros); para las de 2.500 kWh, un 5% más (23 euros más). En la horquilla de 2.500-3.000 kWh también habrá viviendas, aunque no todas, que pagarán más que la subida media estimada por el Ejecutivo.

Tampoco dijo Soria que, por el contrario, la luz bajará para un número importante de hogares españoles. Será para los que tengan un consumo superior a los 4.000 kWh al año, es decir, aquellos que destinan más de 664 euros. Una familia de cuatro miembros, con todos los electrodomésticos básicos, consume de media entre 5.000 y 5.500 kWh anuales. Para éstas, la rebaja en la factura final oscilará entre el 2% y el 3%, es decir, entre 16 y 25 euros menos. Esto supondrá un pequeño alivio para las familias numerosas que tendrán que salir del bono social por superar unos mínimos de renta.

El ahorro (y el sobrecoste) crecerá, por tanto, en función del consumo. “Las viviendas unifamiliares (casas independientes) o las oficinas de pequeñas empresas serán las mayores beneficiadas”, según explican fuentes del sector. Los cálculos realizados revelan que para consumos de 6.000 kWh el recorte será del 3,4%; para 6.500 kWh, del 3,9%; para 7.000 kWh, del 4,4%..., y así progresivamente.

Estos cálculos se han realizado con la Tarifa de Último Recurso (TUR) 2.1 (sin discriminación horaria) con una potencia instalada de 4,6 kW y con el precio de la energía vigente

Fuera de estos cálculos quedan las tarifas domésticas que se encuentran en el mercado libre, que son más de 9,7 millones de hogares y empresas. Para estos, la subida dependerá de la decisión de las eléctricas, que podrán repercutir completamente o no el 6,5% de subida de los peajes.

Las variaciones, en cualquier caso, son diferentes para cada grupo tarifario. Así, para las tarifas 3.1, a la que se acoge la industria, registrarán incrementos aún mayores en el término de potencia, alcanzando el 125%. Esto tendrá sus consecuencias sobre la factura final, ya que las fábricas, a diferencia de los hogares, cesan su actividad los domingos (festivos y en muchos casos los sábados). No obstante, esta subida también tendrá su contraprestación por el lado de la energía, que descenderá el 68%.

 

Fuente: invertia.com (ver noticia)